No hay un trabajador igual a otro, por poner un ejemplo, en una agencia de publicidad conviven diferentes perfiles y cada uno necesita un espacio para trabajar y desarrollar su creatividad. Un redactor opta por el silencio o por cierta música para poner en orden ideas y escribir.
Un diseñador gráfico quizás también se sienta más cómodo trabajando a solas o junto a un compañero escuchando música que le ayude a hacer más ameno su trabajo.Pero no todos necesitamos las mismas cosas para desempeñar bien nuestro trabajo. Ahí entra la figura del coordinador para que el talento creativo se desarrolle al cien por cien. Pero sobre todo sepa canalizar esas ideas en algo productivo para la empresa.
Dejar morir la creatividad se reflejará en la productividad
La creatividad va de la mano de la innovación. Innovar significa diferenciarse de la competencia. Para que esto suceda otorgar una cierta libertad para que un trabajador desarrolle su trabajo suena a fantasía.
Siendo realistas, una pyme no puede equipararse a Silicon Valley ni falta que hace. Si tenemos en cuenta que las grandes ideas pueden surgir en cualquier lugar, el único elemento que puede asimilar una empresa pequeña es la motivación y la confianza en las ideas nuevas.
¿Cómo canalizar las ideas de los trabajadores creativos?
Para empezar, con un ambiente que inspire confianza. Como empleado con ideas buenas pocas ganas puedes tener de compartir si han tardado una eternidad en hacerte un contrato, te pagan mal y sólo recibes adulaciones. Si quieres matar la creatividad, trata mal a tus empleados, y lo lograrás.
Los concursos de ideas, los buzones de sugerencias son lugares donde pueden emerger ideas frescas. La rutina, el conformismo y el miedo son los tres enemigos de la innovación. Si el ambiente de tu empresa huele así, no es extraño que creativos en potencia prefieran desarrollar sus ideas para ellos.
Del buzón de sugerencias a la realidad junto al reconocimiento
De nada sirve que motivemos a los empleados si después de sacudir la cabeza y pensar que esa idea podría ser buena para la empresa, no hacemos nada.
Quien no arriesga no gana. La idea es sólo el primer paso. Ahora hay que transformarla en un proyecto y el trabajador debe estar implicado en él desde el primer momento. No hay nada que frustre más que un jefe que realiza 'homenajes' a sus empleados más creativos, como se dice en el argot publicitario. Es decir, que copia/roba las ideas de su entorno.
En definitiva, la creatividad está presente en todo tipo de negocios, basta con observar a los empleados. No importa que hablemos de vender aplicaciones para el móvil o fruta. Lo fundamental es no hacer las cosas como la mayoría y para ello, hay que dejar un espacio para que esas propuestas fluyan sin cortar las alas.
En Pymes y Autónomos|¿Tendría alguna utilidad una asignatura sobre la creatividad y el emprendimiento?
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