¿Por qué no existe la cultura del emprendimiento en España?

¿Por qué no existe la cultura del emprendimiento en España?
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Cuando preguntamos a alguien lo que van a hacer cuando terminen sus estudios nos encontramos con opiniones de todo tipo pero, en la mayoría de casos, pocas son las personas que respondan de forma taxativa: “voy a montar una empresa”. La mayoría de la población estamos esperando a sacar una oposición o esperar a que una empresa nos llame.

Que España tiene una pobre tradición de emprendedores en comparación con el resto de países desarrollados es algo que a nadie se le escapa. La creación de empresas han de ser la prioridad en un país con unas cuentas públicas tan deterioradas, y todo ello pasa por fomentar la cultura del emprendimiento.

El plano social y educativo es imprescindible

Las dificultades empiezan por el plano educativo. En España prima la comodidad que garantiza un puesto de trabajo o una oposición por encima del riesgo que puede suponer crear una empresa. Generalmente esto es algo que se nos inculca desde que estamos en el colegio, ya desde bien pequeños. Está claro que no todos vamos a ser emprendedores, pero implantar una cultura de esfuerzo, pasión por tu trabajo e ilusión por alcanzar los objetivos en los niveles educativos más bajos es básico para reforzar esa cultura de emprendimiento.

Sin embargo, de nada servirá el reforzamiento en el plano educativo si no contamos con un cierto apoyo en el plano social, sobre todo por parte de nuestros referentes paternos y de nuestro círculo más íntimo. En una gran parte de las ocasiones, la falta de ideas emprendedoras es culpa de los comentarios por parte de la gente más cercana. Como bien dice Alejandro Sánchez Ocaña en uno de sus libros: el peor enemigo de un emprendedor es su propia madre.

No solo influyen nuestros allegados. Debido a la grave crisis que padecemos existe una corriente (en mi opinión infundada) de prejuicios hacia la figura del empresario. Las ideas preconcebidas de que el empresario es un déspota y un explotador están, desgraciadamente, cada día más extendidas. No hay ningún tipo de apoyo para los que fracasan y los que triunfan parecen que lo han hecho por haber explotado a sus trabajadores acompañado de un poco de suerte.

El papel del estado, ¿fomentar la cultura emprendedora?

El estado tiene un papel fundamental en la cultura emprendedora. A nivel político y legal la situación es desastrosa. Tenemos el dudoso honor de ocupar el puesto número 133 sobre 183 en facilidad para comenzar un negocio, por detrás de países que se suponen menos desarrollados como Kenya o Namibia.

La elevada presión fiscal, unido a los últimos aumentos de impuestos y de tasas sobre los autónomos hacen que, además, el Estado se lleve en muchos casos, más de la mitad de los ingresos generados en la actividad empresarial. Ahí es nada. Todo ello, unido a la falta de crédito por parte de las entidades bancarias y falta de ayudas a ideas de negocio, hacen que estemos perdiendo muchas oportunidades de ideas de negocio que podrían llegar a ser exitosas.

¿Qué conseguimos con todo esto? Que el talento emigre o que esté desaprovechado, con la pérdida de competitividad con respecto al resto de países que esto lleva aparejado. Y la pregunta del millón ¿cómo solucionarlo? Fácil de escribir pero muy difícil de aplicar.

En este sentido, el papel del estado ha de ser clave. Modificar el sistema educativo para enfatizar las virtudes del esfuerzo y la realización personal, así como reducir las trabas burocráticas y administrativas para crear empresas han de ser el primer paso que tendremos que dar; pero sobre todo, un cambio de chip por nuestra parte y la de nuestros allegados. Que la envidia que nos surja al ver a algún emprendedor triunfar sea totalmente sana.

No hay nada como la sensación de que la idea por la que hemos luchado avanza y da sus frutos, además de poner nuestro granito de arena para ayudar al resto de ciudadanos y a todo un país.

En Pymes y Autónomos | Fomentar la cultura emprendedora como forma de salir de la crisis
Imagen | Alcalingua – Universidad de Alcalá

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