Ayer me llegó un mensaje a Twitter. "La paella está lista en quince minutos" Era un mensaje de un bar cercano a mi domicilio que utiliza las redes sociales habitualmente, y los domingos hace una paella para ofrecerla de tapa para sus clientes. Lo cierto es que aunque no soy muy amante de este plato me gustó esta forma de usar las redes sociales para atraer al cliente local. Porque el segundo mensaje de este local fue con foto y poco a poco nos va tentando la idea de bajar a tomar una caña.
Son usos puntuales de las redes sociales que nos ayudan a atraer clientes a nuestros locales. Ofrecer el menú de cada día a través de las redes sociales, avisar de cuando salen este tipo de tapas, o que en el mercado hemos conseguido tal o cual materia prima con la que vamos a preparar un plato especial sirven a este local en su estrategia de marketing, y hacen que muchos de los clientes habituales seamos más fieles al mismo.
El ejemplo es el de un bar, pero también lo podemos extrapolar a otros negocios locales. El horno que nos avisa que acaba de sacar la remesa de pan caliente u otros productos para el desayuno, el kiosco que nos informa de la llegada del fascículo de la colección que estamos realizando o una tienda de ropa que nos avisa de un descuento puntual hoy en tal marca de ropa. Lo ejemplos prácticos de cómo podemos utilizar las redes sociales, con poco esfuerzo, para informar a los clientes habituales de nuestras promociones son muchos.
Tan sólo necesitaremos un portátil, un teléfono móvil con conexión a Internet y nuestro mensaje, nuestra foto, etc. llegará a todos los seguidores de forma rápida y lo que es mejor, parte de ellos se encargarán de volver a difundirlo a sus amigos y conocidos, por lo que al fina su extensión será mucho mayor de lo que hubiéramos imaginado. Al final el resultado es un buen número de clientes fieles a las novedades de nuestro negocio.
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