La mayoría de las pequeñas empresas, y me atrevería a decir, que parte de las medianas, gestiona su comunicación con internet con el router que le facilitó la operadora que le gestiona la línea ADSL. En esta entrada vamos a intentar contar la importancia del router en la pyme y como un buen router puede mejorar la gestión de la banda ancha y a su vez darnos algunas capacidades extras para nuestra empresa.
La mayoría de las empresas pequeñas utiliza el router que la operadora con la que tienen contratada la línea ADSL les ha facilitado. Es en este momento cuando uno piensa si esta es la mejor opción para nuestra empresa. En primer lugar tendremos que mirar que las operadoras de banda ancha no dan nada gratis. Si te ofrecen un router gratuito lo normal es que vaya ligado a un contrato de permanencia de un año o similar. Muchas lo incluyen como parte de la oferta promocional de la línea. Pero si nosotros tenemos nuestro propio router podemos intentar diferir esa oferta al precio final a pagar o elegir no tener un contrato de permanencia para poder cambiar de operador.
En definitiva, el router que nos facilitan no nos sale gratis, sino que nos obliga a permanecer con una operadora un determinado tiempo o nos limita la oferta que podrían hacernos si no nos proporcionaran el router. Por otro lado, estos routers proporcionados son cuanto menos mediocres, gestionan la linea bien, pero existen productos que nos pueden gestionar mejor las comunicaciones y además ofrecernos funcionalidades extras.
Un claro ejemplo lo encontramos con los routers inalámbricos, donde los que nos siguen ofreciendo las operadoras siguen el estándar 802.11g que nos proporciona en el mejor de los casos una velocidad de conexión de 54 Mbps, lo normal es que los portátiles y otros dispositivos inalámbricos estén hoy en día preparados para el estándar 802.11n que nos da una velocidad de 300Mbps. ¿Nos funcionan las conexiones inlámbricas? Si, pero a un 15 % de la capacidad que podrían tener, por lo tanto estamos lastrando la velocidad de conexión inalámbrica de nuestra empresa.
Otra posibilidad que tienen muchos routers en el mercado es un puerto USB donde poder conectar una impresora y compartirla en red o un simple disco duro externo donde compartir archivos. Ya se que en ambos casos existen otras soluciones en el mercado que nos dan esta funcionalidad, pero si os fijáis por lo general son más caros que las soluciones básicas del mismo producto sólo por tener una conexión ethernet para conectarlos en red.
Un ejemplo de lo que supone un router para las comunicaciones de la empresa lo tendríamos en la clásica puerta giratoria que tienen algunos establecimientos por la que constantemente está entrando y saliendo gente, en nuestro caso información. Si la puerta nos la proporciona la operadora funciona pero tenemos que empujar más fuerte y cuando hay mucha gente entrando y saliendo le cuesta y puede atascarse mientras que si la puerta la hemos elegido nosotros ya hemos puesto el suficiente cuidado para que esté bien engrasada y gire con rapidez.
Para resumir diremos que existen soluciones en el mercado que gestionarán mucho mejor las comunicaciones de nuestra empresa y a la vez nos darán mayores funcionalidades que los routers que nos proporcionan las operadoras. Además, este router no nos sale precisamente gratis y se lo pagamos a través de distintos conceptos o gastando dinero en productos externos que nos podrían salir más económicos si nuestro router dispone de opciones extras. Tal vez para una pequeña oficina de tres o cuatro ordenadores este tipo de routers sean suficientes, pero para más aparatos conectados a la red simultáneamente necesitaríamos algo más.
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