Con el tremendo éxito que están teniendo los teléfonos móviles inteligentes, las aplicaciones para los smartphones cada día son más relevantes. Hasta hace no mucho la mayoría de las empresas o servicios sacaban su aplicación para iOS y al cabo del tiempo para Android y el resto de plataformas. Pero es ésta la estrategia adecuada con las apps para Android en la pyme, ¿podemos prescindir o tratarlo como secundario?
Sobre todo porque en nuestro país tenemos un mercado que difiere de lo que ocurre a nivel mundial. En España más del 90% de los smartphones que se venden son Android, mientras que el resto se lo reparten entre iOS, Windows Phone y BlackBerry. Sin embargo no se ataca este mercado como principal en la mayoría de los casos.
¿Desarrollamos para Android o para iOS?
A pesar de tener un mercado tan claro, resulta que a nivel mundial los datos son un poco más moderados. Android tiene también mucha ventaja, del orden de dos de cada tres terminales utilizan este sistema, pero también iOS es un mercado importante. Por eso muchas multinacionales sacan antes sus aplicaciones para este sistema operativo móvil.
Por eso creo que hay que diferenciar, las empresas que desarrollan para un mercado local, con aquellas que buscan que su aplicación tenga éxito a nivel mundial. También el comportamiento de los usuarios en ambas plataformas no es idéntico. Mientras en Android las aplicaciones gratuitas financiadas con publicidad son habituales, en iOS, no es lo más habitual.
Es importante por este motivo hacer una prospección de mercado, conocer cómo es el cliente al que se dirige nuestra aplicación, qué hábitos de consumo tiene, etc. No es lo mismo dedicarse a realizar un juego tipo puzzle que una aplicación para un servicio online.
O dicho de otra manera, ¿dónde está nuestro negocio en la app o en el servicio que facilita? Es decir, una aplicación de facturación online no tendrá una App para tener beneficios con ella, sino que tratará de monetizarla consiguiendo más clientes de pago en su servicio online. Por el contrario, una app para editar documentos desde los smartphones lo que busca es que la gente pague por esta aplicación.
¿Qué utilizan los clientes?
Por último algo que no podemos dejar de tener en cuenta es qué utilizan nuestros clientes. Pongamos el caso de una empresa que tiene su web adaptada a la navegación móvil. En este momento decide que tiene que aportar más valor añadido creando una app para ellos, pero ¿desarrollamos primero para Android o para iOS?
En este caso es importante ver con que sistema acceden nuestros clientes. Si la mayoría están utilizando Android, lo ideal es que la primera app que saquemos sea para este sistema. También se puede dar perfectamente la caso contrario, que nuestros clientes utilicen iOS o también que busquemos posicionarnos en un nicho de mercado más pequeño, por ejemplo apostando por Windows Phone.
Un último aspecto que debemos considerar es el uso de las tablets, donde Android también tiene ventaja, en el mercado de consumo del hogar, donde en muchos casos ha desplazado a portátiles y equipos de sobremesa para el acceso a Internet.
El desarrollo de apps cada día tiene más importancia y es fundamental fijar una estrategia coherente en este sentido. Por mucho que seamos especialistas en iOS o trabajemos con Azure y Windows Phone como plataformas estratégicas en nuestro negocio, debemos dar a Android la importancia que tiene para la mayoría de los consumidores.
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