¿Quién no se siente agobiado por la cantidad de interrupciones y alarmas que hay a nuestro alrededor? Constantes notificaciones, actualizaciones de redes, llamadas emergentes...un infierno informativo que nos impide disfrutar de lo que estamos haciendo en ese momento, ya no hablo de ser más productivo o eficiente, sino de conseguir desconectar para tener tiempo para nosotros.
Te sientas delante del ordenador y nuevos mensajes de Facebook o 15 nuevos e-mails que tienen que ser respondidos, comienzas a sentirse quemado y perder la motivación en tu trabajo. Necesitas ser capaz de tomar un descanso de la rutina, dar un paso atrás, recuperar tu punto de vista, aclarar tu mente, y disfrutar de ella, la solución: desconectar.
Al principio no es fácil pero aplicando estas orientaciones quizá lo consigamos:
- Mantén el teléfono en silencio: Así controlamos cuando estamos disponibles, además mi actual compañía en muchos de los puntos en los que me muevo no tiene cobertura con lo que me facilita el trabajo, en ocasiones no es tan malo ser un Robinson en una isla ;).
- Desactiva las notificaciones: Esos avisos en la parte superior de las aplicaciones con los números, están permanentemente llamando nuestra atención como si fuera un imán. ¿Qué tal si las apagamos?, impidamos que nos controlen, seguirán ahí cuando decidamos consultarlo.
- Decide cuánto tiempo dedicas a las redes sociales y se estricto, es la única manera de no perder el tiempo. Quizá pienses que dedicar solamente 15-30 minutos al día es un mito, pero se puede conseguir con disciplina.
- Reordena tus gestores de correo: Si tienes instalada en la primera pantalla de tu teléfono la cuenta de correo, trasládala a la segunda, así no la verás según desbloquees el teléfono.
Seguro que tienes más recomendaciones...¿las añades?
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