Una mujer mira a cámara y habla sobre su situación económica. Le queda poco de paro y ese día tiene una entrevista de trabajo. ¿Cómo encontró la oferta? Por internet. Apenas le llega para pagar la luz, el agua y comer pero cree que ha de tener acceso a la red para buscar un empleo.
Y tiene toda la razón. Recuerdo en alguna ocasión, que tras ofrecer en papel mi currículum me lo devolvieron junto a la siguiente frase: "Envíamelo por email". Los trabajos escasean pero las ofertas se reparten en el mismo lugar.
Los portales especializados son la primera opción para la búsqueda de empleo. Cierto es que al final las ofertas se repiten, pero es una de las vías para buscar empleo.
Los expertos en recursos humanos pueden orientar teniendo en cuenta nuestra preparación y perfil en cuál de ellas darnos de alta. Seamos realistas, para según qué trabajos estar en Linkedin no es la mejor opción.
Pero si el papel, si el currículum en mano no funciona y todo pasa por el filtro de la red de redes, ¿por qué tiene tanto éxito el networking?
Por una razón sencilla, los soportes habrán cambiado, pero lo que realmente funciona son los contactos que tengamos. Las cifras lo demuestran y la realidad también. Ni en papel ni por internet, lo que ayuda a conseguir un empleo, un milagro hoy día, es conocer a la persona adecuada.
La tan manida frase de antaño: "Voy a acercarme al paro, a ver si hay alguna oferta" quedó en el pasado, en el olvido. La familia, los conocidos y los amigos, son más efectivos que el Servicio de Empleo Público. De hecho, es casi una leyenda el haber recibido una llamada desde allí para trabajar.
En Pymes y Autónomos|¿Es el currículum sin foto una medida eficaz para evitar la discrimación?
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